Para ayudarte en estas primeras semanas como madre primeriza, aquí te damos una serie de consejos
La llegada de un bebé es una de las mayores alegrías que puedes experimentar en la vida, pero también de las más estresantes. Sobre todo, si se trata de tu primer hijo. Y es que entender a un recién nacido no es fácil. Para ayudarte en estas primeras semanas como madre primeriza, aquí te damos una serie de consejos para el cuidado de tu niño que darán respuesta a varias de tus preguntas.
¿Cuántas veces come un bebé?
Posiblemente la alimentación sea uno de los temas que más quebraderos de cabeza da a los papás recientes. Lo primero que necesitas saber sobre este asunto es que los recién nacidos tienen un estómago muy pequeño y eso implica que comen cada poco tiempo varias veces al día. Esto significa que debes darles a comer a demanda ya sea dándole el pecho, como recomienda la OMS (Organización Mundial de la Salud) o bien con leche de fórmula. Una vez ha comido, lo ideal es ayudarle a expulsar los gases. Para ello, recuéstalo sobre tu hombro y dale unas palmaditas en la espalda. Eso le ayudarán, aunque también es probable que no surta efecto. En ese caso, un masajito en la tripa puede aliviarle. Si tras la toma tu bebé regurgita, no te preocupes. Se trata de la leche que ha tomado de más.
¿Cómo se baña a un recién nacido?
La higiene del niño también suele suscitar muchas dudas en la madre primeriza. ¿Hay que bañarle todos los días? ¿agua caliente o tibia? ¿cuál es la mejor crema? Aunque la práctica habitual es bañar al bebé todos los días tanto por higiene como forma de relajación, lo cierto es que hay muchos expertos que recomienda que no es necesario hacerlo a diario, pues se corre el riesgo de que la piel del pequeño se reseque. Sea cual sea tu elección y la recomendación de tu pediatra, lo cierto es que el agua debe ser tibia, a unos 36º y debes utilizar jabones neutros lo más naturales posibles. En cuanto a las cremas hidratantes, son necesarias para que tu bebé goce de una piel suave e hidratada. Intenta utilizarlas sin parabenos, conservantes y con ingredientes naturales.
Irritación en la zona del pañal ¿qué hago?
Por el sudor, la orina y las heces, es muy normal que el pequeño tenga irritación en la zona del pañal. En ese caso, cámbiale el pañal muy frecuentemente y lávale el culito con agua y jabón neutro. Después, elije una buena crema de pasta al agua que sirva de aislante. Otra opción es echarle un poco de aceite de oliva virgen en la zona. Este último consejo también sirve para cualquier irritación en otra parte de su cuerpo: cuello, axilas, ingles…
¿Le corto ya las uñas?
¿Tu bebé tiene las uñas demasiado largas y ha amanecido con la cara llena de arañazos? En este momento, ha llegado el momento de que la mamá o el papá se armen de valor y le corten las uñas a su recién nacido. Hay que hacerlo muy cuidadosamente, pues las tienen muy finas y blanditas. Una opción es limárselas en vez de hacer uso del cortaúñas. No obstante, para evitar que el niño vuelva a lesionarse, lo mejor es que le pongas unas manoplas. Además de prevenir arañazos, le mantendrá las manitas bien calientes.
¿Cómo tumbo al bebé en la cuna?
A la hora de recortar al niño en la cuna, puedes ponerle boca arriba y de lado. De hecho, lo mejor es que vayas variando la postura para evitar plagiocefalia, o malformación de los huesos del cráneo por abusar de una determinada postura a la hora de tumbarle en la cuna. Lo que es fundamental que recuerdes es que jamás debes dormir al niño boca abajo, pues hay ciertos indicios que hacen pensar que esta postura podría estar relacionada con los casos de la muerte súbita del lactante.
¿Cuánto duerme un bebé?
Una de las grandes preguntas que se hacen los papás es si su bebé dormirá bien o no. Pues bien, esa duda solo podrá responderla tu hijo. La tendencia general es que los recién nacidos suelen dormir intermitentemente casi todo el día, unas 16 horas aproximadamente. Y a medida que va creciendo necesita dormir menos pero sus siestas son más largas.
¿Cuál es el mejor juguete?
Aunque aún es un poco pronto para comenzar con los juegos didácticos, lo cierto es que a partir de los 4 o 5 meses es un buen momento para ofrecerle sus primeros juguetes, pues es la mejor manera de estimularle. Los mejores juegos son aquellos que les permite reforzar su coordinación visual-manual y comenzar con su desarrollo cognitivo y emocional. Para ello, los sonajeros, mordedores y los juguetes de parque de colores chillones y con sonidos son los ideales para estos primeros meses.